La risa es parte de la evolución de los seres humanos para comunicarse con otras personas. Es una respuesta fisiológica que se da como reacción a la estimulación externa o interna, que nos ayuda a descargar la energía que causan aspectos emocionales.
Existe una investigación publicada en los Institutos de la salud de Estados Unidos que apunta que las risas y las sonrisas son funciones similares a las expresiones que realizan los primates para relacionarse con sus semejantes.
Los beneficios son múltiples: puede ayudar a combatir el insomnio, prevenir los infartos porque se fortalecen los pulmones y el corazón, se reduce la presión arterial, se mejora el sistema inmunológico, facilita la digestión al aumentar las contracciones de los músculos abdominales, incrementa el umbral de dolor, aumenta el aporte de oxígeno al cerebro y mejora la respiración.
A nivel psicológico, elimina el estrés y alivia la depresión porque se liberan endorfinas, las cuales tienen un efecto analgésico que nos da una sensación de placer y bienestar. Además, nos convierte en personas más carismáticas.
También, cuando nos reímos generamos serotonina y adrenalina, hormonas que colaboran con el bienestar físico. Asimismo, aumenta la dopamina lo que significa menos cortisol.
En un estudio publicado en 2017 en la revista ‘Advances in Physiology Education’ se descubrió que la risa facilita el aprendizaje y la creatividad. Además, logra que los estudiantes tengan una relación más cercana. Aparte de permitir que los estudiantes puedan concentrarse de mejor manera.
Cada risa es única y aunque no lo creas existen clasificaciones según el tipo de risa que varía dependiendo su intensidad y si es genuina o voluntaria. Aquí te presentamos algunas de ellas.
Risa genuina.- Es el tipo de risa involuntaria justamente la que nos da grandes beneficios para nuestra salud.
Risa simulada.- A diferencia de la risa genuina esta risa se produce de manera voluntaria e intencional. Su objetivo puede ser: querer pertenecer a un grupo, generar lazos o mostrar una ironía.
Risa social.- Es cuando se usa a la risa como un elemento comunicativo con las personas que nos rodean para tener aprobación o generar lazos.
Risa inducida por sustancias.- Existen sustancias, medicación y drogas que pueden provocar estados de felicidad lo que provoca risas.
Risa patológica.- Existen patologías neurológicas o psiquiátricas que pueden generar risas sin un motivo aparente.
Risa provocada por cosquillas.- A quien no le ha pasado que le han hecho cosquillas y se ha echado a reír. Estas cosquillas se deben a la estimulación de ciertas áreas sensibles de nuestro cuerpo como axilas, pies y cuello. Lo que genera una acción de risa.
Risa denigrante.- Aunque reír es bueno existe el tipo de risa que busca avergonzar a los demás lo que hace que no todos puedan disfrutarlo.
Risa nerviosa.- Hay momentos específicos en los que hemos tenido que disimular una risa nerviosa. La cual intenta rebajar los niveles de tensión que tiene una persona ya sea por una situación estresante o vergonzosa.
Risa malvada.- Viene del teatro y busca comunicar intenciones de maldad. Se ha convertido en un recurso cómico que suelen realizar los villanos.
Carcajada.- La carcajada es el tipo de risa que es de un volumen alto y es prolongada. No se puede detener y en ocasiones hasta hace que nos duela el estómago. Este tipo de risa nos deja una sensación de bienestar muy agradable.
Risa inoportuna.- Esta risa es aquella que ocurre en los momentos más inoportunos como en un momento serio o triste para otra persona. Lo que genera una situación incómoda. Lo curioso de este tipo de risa es que algunos cómicos la usan como recurso para hacer reír a los demás. Aunque parece absurdo, pero a las personas les causa gracia ver personas riéndose en momentos inadecuados.
Hay varias formas de expresar la risa en forma escrita dependiendo del país de origen. Aquí te contamos algunas formas de decirlo. En portugués se escribe “kkkkk”, en italiano se escribe “ahahah”, en francés se puede observar "mdr" como abreviación de mort de rire, lo que significa: muerto de risa, en tailandés es “555555” ya que su cinco suena como “ja”.
Las preocupaciones o nuestro día a día puede hacer que nos olvidemos de reír. De hecho, mientras vamos creciendo cada vez nos reímos menos. Según Alison Beard, autora de Liderando con humor y editora de Harvard Business Review, los niños se ríen 400 veces al día mientras que los adultos 57. Para esos momentos queremos dejarte unos consejos que te hagan reír más.
Ahora que sabes que reír te hace bien esperamos que lo hagas más a menudo para que obtengas beneficios en tu salud.
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