Existen casos de personas que se han infectado de coronavirus aun después de haber recibido la vacuna. Ante esas noticias, muchos se apresuran a concluir que las vacunas no sirven, pero ¿cuáles son las razone por las que estas personas vacunas contraen la enfermedad y cuál es el objetivo de la vacuna?
Conforme más gente reciba alguna de las vacunas disponibles, aparecerán más personas que se infectan a pesar de estar vacunados. Así que, para muchos, estas preguntas son inevitables: ¿Quiere decir que las vacunas no funcionan? ¿Me infectaré de todos modos?
Aunque la respuesta es que las vacunas funcionan existe la posibilidad de que sí puedas infectarte.
Exploremos algunas de las razones por las que ocurren estos casos, así entenderemos mejor cómo están funcionando las vacunas.
No ha pasado el tiempo necesario para desarrollar inmunidad:
La inmunidad no es inmediata. La misión de la vacuna es engañar al sistema inmune para que éste desarrolle los anticuerpos que lo protegerán del virus SARS-CoV-2, este es un proceso que toma tiempo. Y ese tiempo depende de la vacuna que se trate.
Por ejemplo, para la de Pfizer/BioNtech, la inmunidad inicia ocho días después de la segunda dosis mientras que para la de Moderna ocurre catorce días después de la segunda dosis. Recuerda que, para obtener el máximo beneficio de la vacunación, las personas deben recibir la cantidad de dosis recomendada de la vacuna.
Puede haber infección, pero no enfermedad:
Una de las preguntas clave sobre las vacunas es si pueden prevenir la infección o la enfermedad, primero debemos entender que son dos cosas distintas. Hay vacunas que evitan la infección cuando impiden que el virus entre a las células y se replique. Pero también podría haber vacunas que no evitan que el virus entre al cuerpo, pero sí que se replique lo suficiente para que aparezca la enfermedad.
Lo que se reporta en la mayoría de los ensayos clínicos de las vacunas para Covid-19 es su efectividad para evitar que una persona enferme.
Se trata de una vacuna que evita la enfermedad, pero no impedirá que las personas se infecten, cualquier persona vacunada tendrá la misma posibilidad de infectarse que otra que no haya recibido la vacuna. La diferencia es que quien haya recibido la vacuna no tendrá que ser hospitalizada porque su cuerpo habrá desarrollado los anticuerpos necesarios para que esa infección sea leve.
“Dar positivo en PCR no significa una falla de la vacuna, sino que probablemente esta persona no va a desarrollar síntomas graves incapacitantes ni va a ser hospitalizada. Ahí podemos decir que la vacuna funcionó porque la llevó a no desarrollar síntomas graves; mientras que no haber tenido la vacuna aumentaba la probabilidad de que sí lo hiciera. Entonces podemos decir que (a pesar de dar positivo) fue un caso exitoso de la vacuna”, explica la inmunóloga y especialista en enfermedades infecciosas Thalía García Téllez.
La inmunidad por vacunas puede decaer con el tiempo:
Todavía es prematuro determinar cuánto tiempo durará la inmunidad que generen las vacunas. Aunque se prevé que podrían durar más de un año, es probable que después de ese tiempo personas vacunadas puedan infectarse de nuevo. Pero eso tampoco significaría una falla de la vacuna sino simplemente que los anticuerpos que generó el medicamento ya decayeron y es necesario un nuevo ciclo de vacunación.
Lo que sí es una realidad es que a pesar de su alta efectividad las vacunas no son un escudo infranqueable para todos; son, en realidad, una de las varias estrategias que se requieren para protegernos.
Por eso, aún vacunados, habrá que seguir con las medidas de bioseguridad, usando mascarilla, manteniendo el distanciamiento y evitando los espacios cerrados.